lunes, 13 de agosto de 2012

Zamora, Mich. México. 13 de Agosto de 2012


Quizá no encuentres respuestas al leer las cartas de una persona cualquiera. Es muy probable que no vengas a conocerme o no te interese. Es tal vez, y solamente el morbo, o encontrar palabras que no has podido decir,  algo que no has sentido tanto como para escribirlo. 
La oposición, podemos usar mil palabras para describirnos, sin tener que hablar de nosotros mismos. Las cartas como acto comunicativo honesto. 
Los contrastes, la persona que fui, de la que aún tengo partes, lo que ya no soy, pero forma parte de mí en muchos sentidos.
Los claroscuros de los sentimientos que muchas veces, se quedan sólo ahí, en una epístola que nunca se entregó. No hablo de nombres, esos son igual que números que se olvidan, pero el alma se queda ahí, en palabras difícil de explicar, imposibles de admitir.

No hay comentarios:

Publicar un comentario